HEMISFERIOS
Amanece el mes de julio. Una mujer rubia camina desafiante
junto a la piscina. Gafas de sol, pamela y un biquini demasiado pequeño.
Extiende la toalla recreándose hasta en el más mínimo movimiento. Se sabe
observada. Despliega la más amplia de sus sonrisas.
Se tumba sobre la toalla. Bueno, no, perdón, se posa sobre
ella. Los hombros alineados, los glúteos y los omoplatos apoyados en la toalla,
pero la espalda ligeramente curvada. Los brazos paralelos a su cuerpo,
delicadamente perfectos. Una pierna estirada, la otra, ligeramente flexionada.
Se desprende de la parte de arriba del biquini. Todos los ojos persiguen a sus
manos que extienden crema sobre su tersa piel. Se quita la pamela y sacude su
preciosa melena.
-Adoro el verano.
Y corten. Una ayudante enfundada en un abrigo de plumas
corre a arropar con una manta a la actriz.
-Odio el verano.- Exclama tiritando. Los primeros copos
empiezan a caer sobre Buenos Aires.
Trazos y trozos XXVIII
"Hemisferios"
texto: Álvaro Chico Gómez
ilustración: Marta Jiménez Martín
Los matices mas sutiles, se consiguen apreciar con todos sus detalles, en una secuencia de contrastes. He dicho.
ResponderEliminarsin duda el verano, ya sea bueno o malo según diversas opiniones, siempre es un cambio. Algo distinto del resto del año
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